viernes, 14 de diciembre de 2007

Rebelitas



Hoy la adorable niña de mis ojos me sorprendió con este regalo. Me hizo tanta ilusión que tenía que enseñarlo.

3 comentarios:

Blue Pegasus dijo...

Te tengo que dar las gracias para recordarme que tengo un par de cojones y que me repito bastante al respeto. Si no las tuvieras bien puestas y en titanio, no estaria aqui mismo escribiendote.

Del poco que me he abierto, no me gusta deslizar demasiado y contar lo mas oscuro de lo que ha podido occurir. Hace parte de otros capitulos, que el tiempo se ha encargado de poner en su sitio. La realidad, como lo dice, supera la ficcion. Por eso, se puede que escribo una parte de lo que percibo o de lo que siento, solo, en estos mismos escritos, no aparece lo que realmente occurio.

Lo dejo caer entre linea. Nunca lo expondre tal como fue, tan espantoso podria caer, por la persona que lo perpetro. Ademas, si no las tendrias, me habia caido realmente desde el principio, porque en lo que hago, dee forma profesional, no habia podido aguantar y habia huido. He tenido que responder no por mi muchas veces pero por la confianza que los demas han puesto en el sitio donde trabajo, mismo sitio que fue puesto en peligro unas cuantas veces, por este mismo individuo sin escrupulos.

Fuera de eso, siempre viene bien una buena observacion, si a caso uno se ha dormido. En mi caso, me habia gustado tener la posibilidad de dormirme, por lo menos de bajar la guardia un tiempo. Lo aguantado, no se puede medir, ni es interpretativo. Ni se cuenta.

Abrazo quien seas.

P.S. Tiene fuerza lo que escribes y es veloz.

Y sin embargo dijo...

"Pegasos, lindos Pegasos"

Una vez solamente conseguí llegar a tí. Huíste como alma que lleva al Diablo. No te lo esperabas y utilizaste las mismas armas que utilizo yo cuando no me interesa lo que escucho, cambiar de tema. Esa fue la clave.

Siempre he creído que detrás de tu fortaleza, se escondía un ser con una sensibilidad invisible para muchos y un gran sufrimiento pasado. Sólo así se explica el amor y dedicación que pones en lo que haces. Ahora sé que no me equivocaba.

Tú me enseñaste a mirar en mi interior y a escupir toda la basura que había acumulado durante años. Mucha aún sigue ahí, pero ya no huele mal.

Las gracias te las tengo que dar yo a tí.

Besiños.

Chuspi dijo...

La verdad es que solo nos mostramos como personas cuando un pequeño detalle a veces tan insignifante nos enternece tanto...
Felicidades para tu niña.....laniñadetusojos!!!!!